Maestra Triana entregando lección de luz.
La lección para esta noche es la libertad.
Todos los seres humanos deben de comprender que son libres.
Libres desde todas sus células y ese es el problema que no han sabido manejar, por eso, los seres humanos se enferman, se entristecen y no saben hacer relaciones positivas en su vida, ya que al tener el conocimiento de que son libres en toda acción, posición y lugar, deben de entender el segundo paso que se llama el límite.
Todo ser humano que quiere ser felíz, debe conocer que es libre y que debe de aprender a ponerse sus límites.
Empiezas con tu cuerpo; al tener claro que eres libre desde tus células, tienes que hablar con ellas para decirles qué están formando, hacerles de su conocimiento que juntas están formando una unidad de cuerpo humano, y que juntas deben de marchar para que ese cuerpo humano sea libre y felíz. Entonces, todas tus células son libres de seguir tus reglas.
El ser humano también debe de comprender que puede ser libre de lo que quiera, pero entender que la felicidad de su libertad, la ponen los límites que el ser humano se ponga a sí mismo.
No permitas que los demás te pongan límites, porque entonces detienes tu trabajo de luz.
Por eso, debes de vivir en conciencia de aprender a ponerte tus límites y de permitirte la libertad.
La lección es: Eres libre para ser, un ser de luz.
Maestra Triana, en la libertad y uno mismo ponerse los límites ¿se debe tomar en cuenta la consecuencia?
Es claro. La consecuencia tiene que ver con tu nivel de consciencia que manejas; recuerda que la libertad y los límites se ponen conscientes.
Cuando estas consciente, tu sabes que hay a todos tus actos una consecuencia, que es llenarte de luz o llenarte de sombra. Maestra Triana entregó lección.
La lección para esta noche es la libertad.
Todos los seres humanos deben de comprender que son libres.
Libres desde todas sus células y ese es el problema que no han sabido manejar, por eso, los seres humanos se enferman, se entristecen y no saben hacer relaciones positivas en su vida, ya que al tener el conocimiento de que son libres en toda acción, posición y lugar, deben de entender el segundo paso que se llama el límite.
Todo ser humano que quiere ser felíz, debe conocer que es libre y que debe de aprender a ponerse sus límites.
Empiezas con tu cuerpo; al tener claro que eres libre desde tus células, tienes que hablar con ellas para decirles qué están formando, hacerles de su conocimiento que juntas están formando una unidad de cuerpo humano, y que juntas deben de marchar para que ese cuerpo humano sea libre y felíz. Entonces, todas tus células son libres de seguir tus reglas.
El ser humano también debe de comprender que puede ser libre de lo que quiera, pero entender que la felicidad de su libertad, la ponen los límites que el ser humano se ponga a sí mismo.
No permitas que los demás te pongan límites, porque entonces detienes tu trabajo de luz.
Por eso, debes de vivir en conciencia de aprender a ponerte tus límites y de permitirte la libertad.
La lección es: Eres libre para ser, un ser de luz.
Maestra Triana, en la libertad y uno mismo ponerse los límites ¿se debe tomar en cuenta la consecuencia?
Es claro. La consecuencia tiene que ver con tu nivel de consciencia que manejas; recuerda que la libertad y los límites se ponen conscientes.
Cuando estas consciente, tu sabes que hay a todos tus actos una consecuencia, que es llenarte de luz o llenarte de sombra. Maestra Triana entregó lección.
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